domingo, 18 de febrero de 2018

Paisaje en mi rincón

Maravilloso contraste. Gran acantilado escarpado y árido donde parece acabarse el mundo de forma dramática. Abrupto, imponente sobre un mar a veces en calma bajo sus pies, cediendo al poder del que parece más fuerte. Otras veces, un mar erguido en toda su inmensidad, gruñendo y chocando una y otra vez en los pies del gigante pareciendo que intenta derribarlo con toda su furia. Lucha de colores, lucha de fuerzas de la naturaleza intentando ambas reinar en ese lugar donde todo empieza y todo acaba. Tierra convertida en dura roca queriendo dominar el horizonte sobre esa abundancia de agua que siglo tras otro va erosionando su cuerpo, discreta y sutilmente con su suave balanceo que parece que intentara besar la costa en un coqueteo constante pero en realidad va dejando su huella poco a poco, sin prisa pero sin pausa. Intentando ganar terreno pero topándose con la roca una y otra vez que parece responderle así ante su insistencia "hasta aquí has llegado, este es el fin de tus dominios". Fascinante sonido al enfrentarse ambos, seductor y hechicero al oído y a la vista. Espectáculo de danza y magia a lo largo de la historia. ¿Un abrazo y un beso? o ¿Una pelea de titanes? A veces una tregua en el tiempo, respeto mutuo y aparente calma. Escena en tantos lienzos, retratada con palabras en tantos versos y novelas. Escenario al fondo de encuentros furtivos de enamorados, de días de verano de familias al completo, de segundos en pantallas de cine o anuncios de televisión que buscan un público con la adrenalina que corre deseando salir de diferentes formas y momentos. Majestuosos en su posición mientras todo pasa, tu historia y la mía, y otras tantas mientras el mundo gira y permanecen impasibles ante la mirada de tanto admirador.

paisaje en mi rincón
paisaje en mi rincón

miércoles, 14 de febrero de 2018

¿y si seguimos compartiendo San Valentín?

¿y si nos damos la mano y echamos a correr sin mirar atrás? ¿y si no me sueltas nunca? ¿y si sigues ahí siempre cuando los demás no están y la soledad llega? ¿y si me abrazas fuerte cada noche cuando los miedos acechan y las pesadillas cobran vida? ¿y si continuas dándome ánimos cada vez que creo que no puedo? ¿y si sigues a mi lado en todos esos momentos en los que estoy tan sola?  ¿y si sigues mirándome así mientras me hago vieja y mis sueños se escapan, mientras me pierdo en mi pena y me ahogo en la nada? ¿y si me sigues preguntando "quién te quiere más" todos los días de la vida? ¿y si me dices "ríete" cada vez que las lágrimas me inundan y vuelves a conseguir que me ría?

Porque esta loca perdida contigo está un poco más encontrada. 
Porque este alma sin rumbo y vagabunda de risas acaba volviendo a ti por más vueltas que dé. 
Porque estás conmigo en la nada, en el vacío del mundo ruidoso.

¿Y si me dejas rascarte la espalda hasta el fin de los días? ¿y si dejas que siempre el sueño me atrape acariciando tu nuca cuando no encuentro mi paz? ¿y si decimos adiós a lágrimas pasadas y nos secamos las futuras con más amor?

Porque si hubieron dudas, siempre ganaron las mariposas. Porque cuando las mariposas volaron fue fácil hacerlas volver.

Porque eres el tacón de mi zapato, las agujas de mi reloj y la patilla que sujeta mis gafas. Porque eres mi centro y mi Norte, porque fuiste y sigues siendo.
Porque estás en el CD que suena en mi vida, porque eres mi punto de libro y mi guión.
Porque eres una columna que sostiene mi templo.
Porque si fui algo ahora no sé ser sin ti. Porque cuando hay tormenta fuera sé que eres mi paraguas y cuando la hay dentro y me siento vulnerable sólo hay que dejar que todo pase y recuerde quienes somos.

¿y si inventamos nuevos sueños para construir? ¿y si apretamos fuerte para que no se escapen los que ya hemos cumplido? ¿y si seguimos buscando nuestro momento y si seguimos compartiendo más con ellos? ¿y si llenamos de risas las mañanas más oscuras y las noches más largas? ¿y si los abrazos se convierten en nuestra arma más poderosa dentro de las batallas de nuestras rutinas? ¿y si hacemos de ellos nuestros héroes que nos rescatan del abismo en el que a veces parece complicado salir? ¿y si seguimos sentándonos delante del fuego mirando como quema cada uno de los troncos que colocas para que no deje de arder y sabiendo que esa llama renace cada día por mucho que haya momentos en que se apague?

Porque tenemos mucho aunque a veces me parezca nada, porque cuando el fondo está cerca me tiráis la cuerda para subir. Porque ellos y tú, tú y ellos, hacéis de mi lo que soy, eso que a veces no me gusta pero que tiene lo más valioso. Porque estáis aquí y, aunque eso a veces me ahoga, al final es el motivo de mi respirar. Porque ayer, hoy y siempre os quiero todo y más. Porque te necesito y quiero que me necesites, aunque suene egoísmo, para que maquillar.


A ti, aquí y ahora... sin regalos, sin los corazones ni lo material, sin gastar por imposición, porque sí, porque hay mucho más que hoy, porque eres tú mi camino cualquier día ¿y si sigues compartiendo conmigo 365 San Valentines al año?

momentos de amor en mi rincón
momentos San Valentín en mi rincón

viernes, 9 de febrero de 2018

Un momento para escribir

Sigo escribiendo porque dicen que los sueños se cumplen pero hace tiempo que yo dejé de creer en Disney. Sigo escribiendo porque las letras son las únicas que me entienden, las que ponen nombre a mis emociones sin juzgar, sin preguntar y sin reproches, porque son las únicas que nunca me fallan. En mi soledad nunca estoy sola porque siempre están conmigo. A veces no salen, a veces no sé dibujarlas pero están ahí dentro latiendo, quemándome, ansiosas por explotar en cualquier momento en cientos de caracteres que, vomitados sin control, formarán un intento de historia o cuento o poema. O una simple frase, por qué no. Siempre un papel y boli cerca, o su versión moderna para poder sacar todas esas palabras que de pronto me queman y necesito plasmar. 
Soñaba que algún día le interesarían a alguien, soñaba con poder hacer felices a las personas que se enredaban dentro las tramas de mis historias, soñaba que habría una vez que alguien se sentiría identificado con mis emociones y sentimientos. Quizá soñaba poco. Soy bastante realista y objetiva, actitudes que a menudo se etiquetan como pesimista. Pienso mucho en el futuro, pienso en esos libros dedicados que me gustaría publicar, en ese blog con miles de seguidores que disfrutarían mis fantasías pero vivo en el presente. Un hoy que no es señal de que llegue ese mañana, un hoy envuelto de historias que no son preludio de ese horizonte que he imaginado. Soñar no es suficiente, siento decirlo. Por muy bonito, optimista o poético que suene. Y el esfuerzo y el trabajo tampoco lo son. Evidentemente necesarios, imprescindibles pero no suficientes. Mientras ese día llega o acepto definitivamente que es demasiado tarde y mi vida pasó soñando un sueño que no viví, yo sigo escribiendo. A veces poema, a veces novela, la mayoría solo pensamientos que nacen sin más sentido que el necesitar que salgan de mi y que dejen constancia escrita. Palabras, palabras y más palabras que plasmo en un borrador de esperanza deseando que esta vez sea algo más que un montón de frases sin sentido. Personajes sin vida a quienes invento un destino, ofrezco una historia y les hago sentir. Y entonces, esta humilde aspirante a escritora se pierde en su propia trama y se rompe el hilo que une las vidas de esas recién nacidas figuras. Y empiezo de nuevo. Nuevas palabras, nuevas sensaciones y sigo escribiendo. Me evado del mundo y me uno al silencio, necesito esa calma que me da escribir y escribir y escribir. Yo sola, que nadie me vea, ese es mi momento. Mi cita con un lienzo en blanco en el que mi obra empieza a coger forma y, a veces, me atrevo a compartir.  Cada palabra escrita, cada frase enlazada es un suspiro que sale impaciente con la prisa de existir y convertirse en parte de una historia de verdad. Pero mientras, sigo escribiendo. Lo único que nunca me falla y a veces me reconforta. Escribo sin sentido, sin borrador y sin guía, con mucha ansía y deseo de escribir. Emociones o momentos, invenciones o vivencias, cualquier cosa que pueda ser transcrita. Escribo porque me libera, y escribo y escribo y escribo ... 

momentos para escribir en mi rincón
Momento para escrbir en mi rincón



martes, 6 de febrero de 2018

Gotas en mi rincón

Un día más y fuera sigue lloviendo. Lágrimas que riegan el escenario de vidas y sueños, parte del atrezzo de tantas obras en pleno estreno, de tantas otras que repiten función un día y otro más y otras muchas que ponen punto y final a una temporada de éxito o no. Muchos horarios, repetir el papel una y otra vez esperando que cada vez salga mejor pero sabiendo cual es el guión. Estudiado, controlando la situación y tomando las riendas de esas vidas ficticias, metáforas de una realidad paralela. También hay funciones improvisadas que solo unos cuantos se atreven a representar, solo unos cuantos vencen el miedo a ser juzgados por sus actos imprevistos sin notas previas, sin ensayos ni orden de "corten" que se conviertan en tomas falsas antes de un nuevo golpe de claqueta. Gotas que bañan historias porque así se ha decidido. Alguien lo escribió mientras visualizaba el resultado en su cabeza esperando conseguir la escena romántica de reconciliación más bonita antes vista o quizá el escenario de un crimen o momento de terror tan típico en el que siempre es oscuro o la tormenta llega y nuestro protagonista corre bajo ella sin más arma que el miedo, la rabia y el instinto de supervivencia. Los más atrevidos pintarán la lluvia en la escena de sexo más salvaje entre dos personas desconocidas que no han podido apartar la mirada desde que se han encontrado y, sin palabras, se han citado en el callejón más cercano.
Sigue lloviendo aquí en éste, el mundo real. ¿Real? eso creía Truman también. Decorado o naturaleza, todo está mojado. Cuando hay una tregua y escampa durante un momento, la presencia del agua sigue en cada gota que se había posado en lo que encontraba en el camino de su descenso hacia el suelo. Ahí están, aferradas a las hojas de los árboles como lágrima tímida que no quiere salir del ojo. Pequeños cristalitos que individualmente son nada pero se unen con cientos de millones más para formar esa cortina que me parece tan mágica como todos los elementos de la naturaleza. ¿Cómo ha sido tu vida gotita? ¿de dónde vienes? ¿a dónde vas ahora? sabes que tus minutos están contados, en breve desaparecerás y no serás más que un recuerdo de un día de lluvia o ni siquiera eso porque tú sola eres tan insignificante... ¡qué paradoja! tan hermosa e importante y tan insignificante a la vez. Parece que muchos la admiran, se le han dedicado poemas y canciones, es protagonista en pinturas infantiles, necesaria en las vidas, imprescindible para la vida...  pero solo es una gota más que danza entre otras creando todas un espectáculo tan triste como maravilloso.
No sé si sigue lloviendo o eso que oigo es mi corazón desbordado de pena. Me imagino esa gota deslizándose por un pétalo luchando por no caer y sin embargado parece tan cómoda ahí posada... Que efecto produce tan tierno, tan simple como todas las pequeñas cosas que al final son las más grandes y verdaderas. Sola. Sola en la flor más bonita, pero sola empeñada en no caer y sin embargo, por más que luche todo sigue su curso y su fin está en no estar. Era otro complemento más de la escena y la obra terminó.


gotas en mi rincón
momentos de gotas en mi rincón